El jueves día 15, nos reunimos los distintos grupos de la Parroquia para celebrar, en sinodalidad, la Eucaristía final de curso. Presidida por fray Javier, nuestro párroco, como siempre, estuvo cercano a cada uno de los participantes. Fue una sencilla pero emotiva y cálida ceremonia. Pudimos compartir cada uno de los asistentes, en primer lugar, la Palabra, peticiones, ofrendas y ¡cómo no! la acción de gracias por todos los momentos vividos durante el curso, tanto en los grupos como en nuestra vida diaria.
Durante la Celebración pudimos percibir la presencia amorosa de Dios en nuestra vida y la invitación, como no podía ser de otra forma, a ser testimonio del Padre-Madre en cada uno de los ambientes donde vivimos.
Terminada la celebración compartimos un pequeño ágape todos los asistentes.